2018

Salón de la Fama del Deporte Riopedrense

Osvaldo Luis Gil Bosch
Propulsor

Osvaldo Luis Gil Bosch nace un 25 de agosto de 1932, siendo uno de cuatro hijos. Está casado con Leticia López.

Osvaldo llega a Humacao a la tierna edad de tres años. Hizo sus estudios en las escuelas publicas de Humacao donde participa activamente en los equipos de baloncesto, volibol, atletismo, softbol y por supuesto beisbol. Hace su bachillerato en la UPR, donde participa en los equipos de beisbol y softbol. Estudia leyes en Richmond Virginia y establece a su regreso su bufete en Humacao.

El 4 de enero de 1970 es elegido presidente del Circuito de Beisbol Aficionado. Durante 33 años fue presidente de la Federación de Beisbol. Fungió como vicepresidente del Comité Olímpico durante 17 años y ocupó el puesto de presidente en el 1990.

Gil fue jefe de delegación en todas las delegaciones Olímpicas de Puerto Rico desde el 1976 al 1991. Excepto en la de Rusia, fue delegado en cuatro Juegos Centroamericanos, tres Panamericanos y tres Juegos Olímpicos. En el plano internacional ha sido reconocido como uno de los lideres meritorios del beisbol, siendo proclamado "Ejecutivo del Año" en la Federación Internacional de Beisbol. Durante 16 años presidió la importante Comisión Técnica de la Federación Internacional de Beisbol.

Miembro del Comité Organizador de los Juegos Panamericanos de Puerto Rico en el 1979, fue factor cohesivo en su celebración dentro de serias controversias. Su apoyo incondicional fue determinante en la consecución de la sede de los Juegos de Mayagüez 2010.

Durante su presidencia en la FBAPR, el equipo nacional obtuvo 20 medallas; 6 a nivel mundial con 4 de oro, 6 de plata y 10 de bronce.

Fue exaltado al Salón de la Fama del Deporte Puertorriqueño en el 1993. El 15 de diciembre de 2002, el entonces secretario de Recreación y Deportes, George Rosario, lo honra estableciendo el premio Osvaldo Gil Bosch en la premiación anual de Valores Juveniles en el Deporte. En octubre de 2002 la Cámara de Representantes se reunió en Sesión Especial para reconocer su aportación al deporte puertorriqueño.

A Osvaldo se le reconoce como hombre probo, cuya rectitud es legendaria. En sus desempeños se ha distinguido por la seriedad y compromiso con los valores deportivos y culturales de nuestra patria.